pasó el verano
como pasaban los días
en el metal enrojecido.
pasó el verano
y desde entonces
el nido se
vació por completo.
la culpa era
lo de más
en una tierra venida a menos.
luego volví a
compartir
cada mierda que piso
con un conjunto de
muchas
otras
varias
mierdas que
me observan desde
toda ventana.
y cada verano
pasa y
te arde en la piel,
ufano por
las consecuencias.
miércoles, 15 de julio de 2009
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weiiii!!! poeta macarra, te iré leyendo!
ResponderEliminarBuen verano!